Las prendas o fajas post-operatorias vienen usándose prácticamente desde los inicios de la liposucción por la necesidad de mejorar la incorporación del paciente a la actividad cotidiana.
Varios son los criterios que hay en este contexto, aunque cada vez hay más unanimidad en el protocolo que remarca que la faja compresiva es muy importante, así como los masajes recuperadores, Drenaje Linfático manual, ultrasonidos transcutáneos, etc.
Una prenda no ajustada, mal diseñada, o mal indicada, puede producir deformidades cutáneas, o una recuperación más tardía. Por ello, desde hace más de 20 años empleo prendas profesionales con alta elasticidad, y diseño para cada zona, a fin de reforzar las partes de la anatomía masculina o femenina, para un resultado final óptimo. (http://www.voe.es/).
Habitualmente recomiendo a mis pacientes llevar la primera semana la prenda todo el tiempo hasta el día 5-7. A partir de entonces se lleva la faja sólo durante el día, permitiendo descansar de ésta durante la noche. Las prendas son de uso sanitario, y permiten el aseo personal sin necesidad de retirarlas.
Otra prenda complementaria es la pieza de espuma que se adhiere a la piel y la colocamos debajo de la prenda en áreas críticas. Este material debe ser poliuretano de grado médico, cuya acción es distribuir/aumentar la presión y hacer que la presión sea distribución homogénea , disminuyendo en gran medida los hematomas y edemas post-operatorios, minimizando los pliegues y surcos, que suelen producirse en el abdomen, y redundando en la evolución más satisfactoria del tratamiento de modelación corporal. En tratamientos de abdomen, definición muscular y tratamiento de zona lumbo-sacra es habitual y recomendable.
En ocasiones recomiendo dos prendas, para poder alternar a partir de la semana, y disponer siempre de una prenda limpia.
En nuestra consulta se podrá probar la prenda indicada antes de la cirugía para comprobar el grado de compresión y comodidad.
Saludos y buena recuperación¡¡
Dr X. Armengou
Las prendas o fajas post-operatorias vienen usándose prácticamente desde los inicios de la liposucción por la necesidad de mejorar la incorporación del paciente a la actividad cotidiana.
Varios son los criterios que hay en este contexto, aunque cada vez hay más unanimidad en el protocolo que remarca que la faja compresiva es muy importante, así como los masajes recuperadores, Drenaje Linfático manual, ultrasonidos transcutáneos, etc.
Una prenda no ajustada, mal diseñada, o mal indicada, puede producir deformidades cutáneas, o una recuperación más tardía. Por ello, desde hace más de 20 años empleo prendas profesionales con alta elasticidad, y diseño para cada zona, a fin de reforzar las partes de la anatomía masculina o femenina, para un resultado final óptimo. (http://www.voe.es/).
Habitualmente recomiendo a mis pacientes llevar la primera semana la prenda todo el tiempo hasta el día 5-7. A partir de entonces se lleva la faja sólo durante el día, permitiendo descansar de ésta durante la noche. Las prendas son de uso sanitario, y permiten el aseo personal sin necesidad de retirarlas.
Otra prenda complementaria es la pieza de espuma que se adhiere a la piel y la colocamos debajo de la prenda en áreas críticas. Este material debe ser poliuretano de grado médico, cuya acción es distribuir/aumentar la presión y hacer que la presión sea distribución homogénea , disminuyendo en gran medida los hematomas y edemas post-operatorios, minimizando los pliegues y surcos, que suelen producirse en el abdomen, y redundando en la evolución más satisfactoria del tratamiento de modelación corporal. En tratamientos de abdomen, definición muscular y tratamiento de zona lumbo-sacra es habitual y recomendable.
En ocasiones recomiendo dos prendas, para poder alternar a partir de la semana, y disponer siempre de una prenda limpia.
En nuestra consulta se podrá probar la prenda indicada antes de la cirugía para comprobar el grado de compresión y comodidad.
Saludos y buena recuperación¡¡
Dr X. Armengou